SANTO DOMINGO.- El revuelo causado en los días que antecedieron la escogencia del secretario general de la Liga Municipal Dominicana (LMD), puso de manifiesto las pugnas internas que afloran en cada uno de los denominados partidos mayoritarios del sistema electoral dominicano.
La sociedad pudo observar como una facción del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), organización que cuenta con unos 75 alcaldes y con sus aliados suma 81 de los 158 que hay en el país, estaba impulsando al secretario de asuntos municipales peledeísta Ignacio Ditrén, mientras se rumoraba en los corrillos políticos que otro grupo lo rechazaba por pertenecer al equipo político del expresidente de la República, Leonel Fernández.
Mientras el Partido Revolucionario Dominicano (PRD), organización que cuenta con 32 alcaldes y está considerado como el principal aliado del PLD, lanzó con bombos y platillos a su eterno candidato José “Neney” Cabrera quien enarboló que la liga, estaba incluida entre los acuerdos de ambas organizaciones políticas para ser cedida al partido de jacho prendido.
Las declaraciones de Neney, crearon un avispero entre los peledeístas los cuales a través de su secretario general, Reinaldo Pared Pérez, establecieron que esa organización no había hecho ningún acuerdo con el PRD que involucrara el organismo estatal que asesora los ayuntamientos del país.
Finalmente fue reelecto en la posición, con una votación de 109 votos de 140 alcaldes presentes en la asamblea Johnny Jones, perteneciente a la facción del Partido Reformista Socialcristiano (PRSC) que apoyó la candidatura del presidente Danilo Medina.
Jones, tiene cinco años al frente de la LMD, tras concluir su primer periodo en enero del 2016 el mismo le fue extendido por doce meses.
Sorprendió que 9 de los 30 alcaldes del Partido Revolucionario Moderno (PRM), cuya dirección “bajó la línea” de que no podían apoyar a ningunos de los candidatos impulsados por el PLD y el gobierno, votaron por Johnny Jones, lo mismo hicieron los pertenecientes a la franquicia reformista.
Se dice que a pesar de que en un principio el Comité Político del PLD, conformó una comisión para definir las situación de la liga, las pugnas internas entre las facciones que encabezan Danilo Medina y Leonel Fernández conllevó a que la situación se les saliera de las manos, al final se tomó una medida salomónica reeligiendo a Jones para no mostrar debilidad
La realidad es que la escogencia del secretario general de la liga, puso en tela de juicio la autoridad de la dirigencia de los partidos políticos y a la vez puso al desnudo las pugnas internas que permean a lo interno de los partidos.